¿Padeces del síndrome de la mujer agotada? Sigue estos 7 consejos

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“Madrugando para poder sacar adelante las horas de trabajo, conectadas continuamente a sus correos profesionales mientras educan, cuidan y gestionan las necesidades de la casa. Y están agotadas”.

Así describe la coach de liderazgo personal y profesional y fundadora de El Factor Humano, Mónica García en ABC un mal que afecta a muchas mujeres. “Es lo que se conoce como el síndrome de la mujer agotada. El mal del siglo XXI”, indica.

Causas

Este problema ocurre principalmente, porque aún vivimos en una sociedad en la que la carga doméstica y del cuidado de los hijos recae principalmente en la mujer.  Esto, sumado a la carga profesional y de trabajo, genera que las mujeres deban realizar malabares día tras día.

Mujer haciendo muchas tareas del hogar
Mujer haciendo muchas tareas del hogar

Además, entre sus causas está la sobre exigencia y el exceso del sentimiento de responsabilidad.  La psicóloga María Jesús Álava señala en Saber Vivir que mientras que los hombres “se perdonan muy bien a sí mismos”, las mujeres “somos demasiado autoexigentes para darnos permiso a nosotras mismas, de modo que acabamos responsabilizándonos de todo”.

Síntomas

En un artículo hecho desde la plataforma de asistencia psicológica PSonríe en Psicología y Mente, se señala que los síntomas de este síndrome son insomnio, olvidos frecuentes, cansancio físico y mental, e irritabilidad.

Mujer en la oficina agotada
Mujer en la oficina agotada

Si bien, es normal que algunos de los anteriores pasen de vez en cuando, hay que diferenciar cuando suceden casi la mayor parte del día y de la semana.

Asimismo, estas mujeres suelen tener exceso de sentimiento de culpa por no “poder con todo”. Se ven sobrepasadas en sus tareas diarias, y se agotan por ellas, a la vez que se reprochan a sí mismas por no poder cumplirlas todas.

Consejos

Si bien, el consejo más práctico y efectivo es atacar la raíz del problema y quitar actividades estresantes en el día y sumar tiempo de recreación y relajo, no todas pueden hacerlo de forma tan fácil. Por eso, Mónica García da algunos consejos para sobrellevar el agotamiento:

1. Priorizar el sueño

El sueño es la forma que tiene nuestro cuerpo de cargar energías. Es reparador y pone en buen estado nuestros organismos. Aumenta nuestra concentración y atención, lo que en consecuencia disminuye el tiempo en que nos demoramos en ciertas tareas. Además, nos mantiene de mejor ánimo y humor. Por eso, es recomendable dormir entre 7 y 9 horas.

2. Renovar energías en el día

Según explica, descansar sólo al final del día no es una buena estrategia. Aconseja hacer descansos durante el día entre actividades. Puede ser estirar el cuerpo o parar para tomar un vaso de agua, que además te mantiene hidratado. 

3. Enfócate en una sola cosa

Es recomendable trabajar en serie. Dedícate a una cosa, y cuando la termines recién presta atención a otra actividad. Esto hará que al terminar algo sientas satisfacción por tu logro, y te irá motivando.

Para hacer esto, es bueno reducir al máximo posibles distracciones, como apagar el celular, pedir a alguien que cuide a los niños mientras te encierras en una habitación a trabajar, etc.

Para reducir actividades, es bueno darse un tiempo a la semana para organizar lo que se hará en esa semana, en vez de hacerlo día a día. Por ejemplo, preparar un menú semanal.

4. Piensa en la meta final

Muchas veces al hacer una actividad estresante o desagradable, nos enfocamos en lo incómodo del momento. Algo que puede ayudar es pensar en el porqué se realiza esa tarea. Puede ser algo físico como un fin moral o ético.

Quizás este punto de vista te ayude a descartar actividades de fines difusos.

5. Sé tu partner y no tu jueza

En la vida desde chicas se nos inculca un “deber ser” (como si hubiera una “forma correcta para todo”), que muchas veces contradicen nuestras satisfacciones, deseos o sentimientos de desagrado. Lamentablemente, al crecer repetimos lo inculcado con nosotras mismas no de forma consciente.

La coach indica que la autoexigencia es un gran gasto energético, e indica que se debe reforzar la relación con una misma como una buena amiga.

6. Elige la información que consumes

La información que conocemos afecta inevitablemente nuestras emociones y decisiones.  En ocasiones es bueno no ver información que se escapa de nuestro control y te mantiene irritada o frustrada. Si es un tema de interés, puedes posponerlo para un tiempo en que no realices trabajos estresantes o puedas discutirlo con alguien.

7. Pide ayuda

Pedir ayuda concreta sin miedo es muy importante. Hay que dejarse ayudar y aceptar que somos humanos que a veces no podemos con todo.

Como forma adicional a lo que dice la coach, te recomendamos no ser sólo autoexigente, sino también comprensiva contigo y tus emociones. Asimismo, no tengas miedo de hablar cuando consideres que algo no está siendo justo, como una tarea mal repartida entre tú y tu pareja. Así también, es bueno reflexionar por qué aceptamos a veces este tipo de injusticias.

Fotos: Freepik