Embarazo ectópico: cómo se detecta y qué se puede hacer 

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Existen distintas complicaciones del embarazo que no permiten que este llego a término e incluso pueden poner en riesgo la vida de la madre. 

Una de ellas es el embarazo ectópico, que se produce cuando un óvulo fecundado no se implanta en el revestimiento del útero, como es lo normal. Sino que se aloja fuera de la cavidad principal uterina.

En la gran mayoría de estos casos, el óvulo se implanta en las trompas de Falopio, sin embargo también pueden hacerlo en los ovarios, el cuello uterino, el abdomen, el istmo, la porción ampollar,  entre otros lugares (aunque es muy raro).

Embarazo ectópico
Embarazo ectópico

¿Cómo se detecta?

El embarazo ectópico sólo lo puede detectar el médico a través de exámenes. 

Si bien hay ciertos síntomas que se pueden presentar (hemorragia vaginal,  dolor, masa palpable), menos de la mitad de las mujeres que tienen embarazo ectópico los manifiesta, por lo que es muy importante acudir a todos los controles con el ginecólogo.

Es probable que el médico realice:

Análisis de sangre para ver niveles de la hormona gonadotropina coriónica humana (revisar si hay niveles bajos).

Examen pélvico para palpar bultos y zonas sensibles.

Ecografía, ya que en un embarazo normal debe en el primer trimestre establecer la localización del embrión. Si no se comprueba un embarazo intrauterino, se considera el riesgo de un embarazo ectópico.

Laparoscopía.

¿Qué se puede hacer?

Cabe señalar que el embarazo ectópico no puede llegar a término, y debe interrumpirse para evitar derrames que pongan en riesgos la salud de la mujer. Además, el óvulo fecundado no es capaz de sobrevivir.


Convencionalmente se recurre a una cirugía con la eliminación de una de las trompas de Falopio. 

No obstante, en un diagnóstico precoz el médico puede ordenar un tratamiento para inhibir el crecimiento celular del saco gestacional, en el que se conserva la trompa de Falopio.

Cabe señalar que es posible volver a embarazarse tras un embarazo ectópico (dependiendo de muchos factores como estado físico, reserva de óvulos, daños en las trompas de Falopio, etc), aunque las posibilidades de volver a tener otra gestación ectópica son mayores.