Padre inyectó heroína a sus hijos y le quitaron la custodia
El padre de los bebés les inyectaba heroína para "ayudarlos a dormir", por lo que fueron retirados de su cuidado y el de la madre.
Por mucho tiempo, cuatro niños, incluyendo dos bebés, sufrieron una impactante negligencia por parte de sus padres. En un informe elaborado por varias agencias como el Consejo del Condado de Lancashire y la Policía de Lancashire, en el Reino Unido, se reveló un terrible caso.
Uno de los hermanos mayores, hijo del mismo padre que los bebés, contó a las autoridades que su progenitor le inyectó heroína a los dos bebés para que se durmieran. Y efectivamente, las guaguas dieron positivo en las pruebas de opiáceos.
Es más, se halló un “posible hematoma por inyección” en el muslo de uno de los niños pequeños, por consiguiente, todos los hermanos fueron retirados del cuidado, de acuerdo al informe sobre la implementación de las prácticas de protección infantil citado por el Daily Mail.
Pese a la negligencia crónica de estos padres, la policía encontró errores y fallas en la manera en que los servicios sociales se encargaron del caso, detalló el Daily Mail, criticando la lentitud para encontrar los síntomas de una “negligencia significativa”.
En ese mismo informe, también se destacó el exceso de esfuerzos en apoyar la adicción de ambos padres -la madre consumió drogas en el embarazo, lo que desató un síndrome de abstinencia por opiáceos en uno de los bebés- en vez de velar por el bienestar de los bebés.
Padre y su consumo de drogas
Chloe y Harper, nombres falsos de los dos menores, estaban bajo un plan de protección infantil desde el año 2018 debido a la negligencia que involucró antecedentes de abuso doméstico, salud mental de los padres, abuso de drogas y alcohol, además de comportamiento delictivo.
La autora de este informe, Amanda Clarke, señaló que "a pesar de la evidencia de que ambos padres continuaban abusando de las drogas", el plan de protección infantil se terminó solo diez semanas después.
En una ocasión, el padre intentó quitarse la vida y llegó a una de las escuelas de los niños bajo los efectos de las drogas.
“El examen de lo que sucedió en las vidas de los cuatro niños y su familia ha puesto de relieve el entorno de abandono significativo en el que vivían. La breve retroalimentación disponible de los niños, ayuda a mostrar cómo era la vida para ellos y que durante gran parte del tiempo lo estuvieron, como dijo Lucas, -nombre falso de uno de los hijos mayores- asustados y confundidos”, recalcó Clarke.